domingo, 9 de septiembre de 2012

Se abre el telón y...

Le encantaba dejarse caer en la cama, con una buena música de fondo y la cabeza repleta de ideas. Cerraba los ojos. Con fuerza. Poco a poco notaba cómo los acordes del piano la iban envolviendo. Sólo estaban ella y sus pensamientos. La canción terminaba y volvía a comenzar, una y otra vez. Su respiración se iba relajando y los recuerdos empezaban a amontonarse pidiendo paso. Exigiendo atención. ¡Pero no! En ese momento tenía cosas más importantes que atender: sus sueños.  
Deseaba tantas cosas que no estaba segura de que pudieran llegar a cumplirse. Un pequeño suspiro se escapa entre sus labios y frunce el ceño. ¿Cuántas veces se ha preguntado lo mismo? Y la respuesta sigue sin llegar. Finalmente pausa la canción y abre los ojos, clavándolos en el techo. Ojalá fuera una de esas personas que vive el día a día. Que no se preocupa por el futuro o que no le da mil y una vueltas a todo. Quizás en un par de años... Su cuerpo entero se estremece sin poder evitarlo. Sabe perfectamente que esa parte de ella nunca cambiará, pero tal vez sea mejor así. 

Y como siempre, se incorpora. Echa todas sus preocupaciones a su espalda y esboza una media sonrisa.   ¡Aquí estoy! Dice mirándose frente al espejo que tiene delante de la cama. Preparada para que comience la función.

domingo, 29 de enero de 2012

Mi siempre empezó el día en el que te conocí.


Hace un año que mis labios rozaron los tuyos por primera vez. Un año, que mi piel se puso en guardia ante el suave tacto de tus manos. Un año, que mi sonrisa apareció sin preguntar, contagiada por la tuya. Un año, sin parar de reír con cualquier payasada nuestra.

Pero ante todo, hace 365 días que te estoy amando. Y toda la eternidad por delante para seguir haciéndolo.

miércoles, 30 de noviembre de 2011

sábado, 26 de noviembre de 2011

Un.sin.sentido.

¿Qué se supone que debes de hacer cuando no te llega la inspiración? Cuando te sientas delante del ordenador y miles de ideas te tocan a las puertas de tu mente; les abres y te encuentras con NADA.

Es extraño, tener ganas de escribir y no saber sobre qué. O peor aún no estar conforme con lo que teclean tus dedos. Borras una palabra y luego terminas por el párrafo entero. Miras la pantalla una y otra vez, como a la espera de que tus dedos sean tan independientes como para escribir aquello que no es capaz de soltar tu corazón. Porque al fin y al cabo, es con lo que escribimos; con el corazón.

La mente es sólo un peón a cargo suyo. Escribimos lo que nos hace felices. Lo que nos gustaría que nos hiciera. O lo que querríamos que fuera realidad, una vía de escape quizás.
Lo que está claro es que el humano de por sí es inconformista. Y yo, no voy a ser mucho menos.

jueves, 13 de octubre de 2011

one more.

Dicen que cuando te planteas si quieres a una persona, significa que has dejado de quererla para siempre. ¿Y qué sucede si no dejas de preguntarte cuánto más puede dar tu corazón?¿Cuánto más puedes llegar a amarla? ¿Significa eso que no sabes ni la mitad de lo que vas a llegar a dar por ella aún?

No sé cuánto más se podrá agrandar mi corazón. Ni si querrías alojarte en él indefinidamente. Sin alquiler. Sé que no te gusta nada el significado de esa palabra, y que no quieres tenerla más en tu vida. Por lo tanto, te propongo algo: no te vayas. Quédate en él. No hace falta contrato, tus ojos serán mi aval. Ya que el derecho a compra lo ganaste desde la primera sonrisa.
Tampoco sé si estás cómodo entre tanto trasto emocional y polvo. O si crees que falta algún que otro tabique de madurez, o quizás te gustaría cambiar algunas cosas de lugar, unas manías o el reloj de la entrada que lleva un par de minutos retrasados.
Incluso te pido perdón, si algún día no encuentras lo que has ido dejando poco a poco. Si entre tanto desorden emocional, tanta felicidad, se me extravían algunos recuerdos. Pero desde que te conocí puse un letrero bien grande en la puerta, que prohíbe el acceso a cualquier cosa que no te vaya a hacer feliz.
También tengo que decir, que no sé si habías estado alguna vez en un sitio mejor, con un jardín más amplio tal vez o con un bonito balcón con vistas al mar. Pero éstas "cuatro" paredes están repletas de amor y de buenos momentos nuestros. Con un gran ventanal, justo en frente de la cama. Para poder pasar días entre las sábanas, diciéndonos cosas sin hablar.


Pero por ti, hago limpieza hasta del trastero, por si también quieres coger ese hueco. Y porque con un beso haces que tiemblen mis cimientos. Que me de un vuelco el corazón, ese lugar donde quiero que te sientas como en casa.

viernes, 19 de agosto de 2011

Porque el tiempo pasa amor..

Domingo. Y aquí estamos tú y yo. Haciendo nuestras estas cuatro paredes que nos rodean. Impregnando cada esquina, cada centímetro de esto que llamamos amor. Esto, que permíteme decir; para mi ha llegado a algo más.Pasado mañana nos iremos, dejaremos atrás las mañanas en las que se pegan más de lo normal las sábanas, los desayunos sin diamantes pero mejor aún, contigo. Las risas cuando se nos quema la comida o simplemente nos picamos por tonterías. Las siestas interminables y los atardeceres desde el balcón. Mis locuras y tu forma de quererme. Las noches a las cuáles siempre les faltan horas y les sobran ganas. Las copas de más y tus bailes graciosos por el suelo de cualquier pub. Pero tranquilo. Que dejemos atrás todo esto no significa que no vaya a recordártelo. Cada día, con una sonrisa tímida, o incluso pillina. De esas con las que no hace falta decir nada más, te vendrá a la mente. Todos esos momentos vividos, todo lo que poco a poco vamos creando. ¿Y sabes qué? Quiero más, más a tu lado.


lunes, 25 de julio de 2011

#

Sé que hace mucho que no escribo algo en condiciones. ¿Falta de inpiración? les aseguro que no es, tengo la mayor fuente de todas a mi lado. ¿Falta de ganas?, menos aún. ¿Falta de tiempo..? ¡Ahí está la cuestión!


Mi verano no está siendo precisamente relajante. Pero encontraré huecos.
Mentira. Para escribir no se buscan huecos, aparecen solos...
..venid a mi.